Sus restos fueron sepultados hoy en el Cementerio de Colonia Caroya.
FM Comunicar la entrevistó cuando cumplió 100 años, el 14 de marzo pasado. Aquí, el recuerdo.
Doña Elvira nació el 14 de marzo de 1914 en la localidad de Luque, de donde era su papá.
Su madre, Celestina Cressa, era de la Colonia y de niña y adolescente venía a visitar a sus nonos, hasta que a los 15 años se radicó definitivamente en Caroya.
Apenas instalada en el pueblo, le tocó vivir un momento histórico: la fundación del Club Juventud Agraria Colón. Doña Elvira era, hasta ayer, la única socia fundadora en vida de la institución del Lote XIII, nacida el 1 de mayo de 1932.
Ella tenía 17 años y la primera comisión se caracterizaba por estar integrada por personas jóvenes, ya que el primer requisito era ser soltero.
“Eso no marchaba. ¡Cómo iba a andar si era sólo de solteros! Después cambiaron eso. Recuerdo que me buscaron para hacer el club, ¡pero nosotros qué sabíamos de club! Acá había uno en Puesto Viejo y era sólo de fútbol. Al principio teníamos la sede en la esquina, hacíamos bailes, pedíamos donaciones a comercios, todo para levan-ar el club. Las mujeres nos ocupábamos de vender números, había ruleta”, cuenta.
Una mujer, Angelina Braida, fue la primera presidente del club surgido por iniciativa de la Federación Agraria Argentina, impulsora también de la Cooperativa La Caroyense.
Doña Elvira fue homenajeada cuando Agraria realizó la cena por el 80º Aniversario, en 2012.
Doña Trevisani era la mayor de siete hermanos, cuatro de los cuales fallecieron.
Las dos más jóvenes tienen 84 y 88 años. “¡Yo ya me pasé!”, dice.
Se casó a los 25 años con Santiago Carlos (“Carlitos”) Rizzi (también presidente de Agraria), con quien tuvo dos hijos: Edmundo Dante y Vilma María Rizzi de Peschiutta.
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