El reclamo surgió por la respuesta negativa a cuatro ítems del salario que perciben los trabajadores de la Municipalidad y que debían negociarse después del pasado 18 de abril.El Sindicato pide aumentar el refrigerio un 27 por ciento (de 681 pesos a 867); subir en un 70 por ciento el beneficio social de la canasta alimentaria (de 344 pesos a 584); y duplicar el beneficio del presentismo, que actualmente está en 100 pesos.
Eso significa una suba de bolsillo por cada trabajador de 526 pesos por mes.
La tensión aumentó en los últimos días después que el SITRAM le informó al Ejecutivo que comenzaba el conflicto y que en cualquier momento se podría tomar una medida de fuerza.
El Ejecutivo respondió que, “según lo pautado en la ordenanza 1867/15, comunicamos que deviene ilegal cualquier medida de fuerza y que cualquier cese en la actividad será descontada de los haberes del agente”.
El Intendente, en diálogo con Radio Comunicar, dijo: "Sucede que en marzo se acordó la pauta para todo el año, una pauta de las más altas del país porque el 34,5 por ciento de aumento ni siquiera lo consiguieron gremios que estuvieron en paro durante varios días; nunca dijimos que íbamos a dar algo extra y solamente se habló de sentarnos a ver, según nuestra economía, el ítem de refrigerio; ahora resulta que es refrigerio, ayuda a la canasta alimentaria, presentismo y quieren agregar un adicional por puntualidad; a nosotros nos representa 758 pesos extra por mes por cada obrero, es una barbaridad que no podemos hacer, no corresponde; y, por otro lado, estoy finalizando un mandato y no puedo comprometer- en esos montos a la economía de la Municipalidad”.
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