Horacio Pueblo Guarany pasó por la ciudad de Estación Juárez Celman y dejó su huella. En la última noche de la Fiesta Criolla, la leyenda viva del folclore cantó sus tradicionales canciones ante un público superior a las 2.500 personas que lo ovacionó.
El clima fue un factor condicionante, pero no pudo con las miles de personas que desafiaron la llovizna intermitente que amenazaba con no parar. Durante el recital de Guarany no cayó una gota; la emoción de muchos era incontenible al presenciar este show histórico en la ciudad.
Guarany, de 88 años, dijo que si deja la música “se aburre, por eso vino a cantar a Juárez Celman”. Fue declarado huesped de honor por el Ejecutivo municipal y recibió de la mano de la intendente Myrian Prunotto una placa como homenaje a su participación en el festival. Luego compartieron una cena en el sector vip.
Leandro Prunotto, Lucio Brizuela, Mixtura, Los Sacha, entre otros, fueron los que antecedieron al reconocido cantautor. Una noche inolvidable: la presencia de una figura tan relevante marcó un antes y después no solo en la historia del festival que culminó su tercera edición, sino en la ciudad.
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